MUERTE DE UN CICLISTA

Me he enterado en las noticias

de la muerte de un ciclista

que en Madrid ha fallecido

circulando por la pista

de bicicletas, del centro, 

en la calle de Alcalá.

Cincuenta y ocho de edad,

mucha vida por delante.

Se lo ha llevado un camión

en un imprevisto giro,

que no ha podido evitar,

y ha caído malherido,

golpeándose en el suelo,

y arrollado, sin remedio,

por las ruedas del gigante,

en combate desigual.

Triste noticia, sin duda,

la que acabo de contar.

Una vida que se esfuma,

un ciclista muerto, más.

Pero aquí no acaba todo,

pues me acabo de enterar

que ese ciclista que ha muerto,

un hombre con esa edad,

reconocido por Juanjo,

una persona ejemplar,

era compañero nuestro,

con carácter singular,

con una voz dulce y tierna,

y aunque algo retraído,

cariñoso de verdad.

Coincidimos en Biodanza

vivenciando nuestras vidas.

Compartimos las miradas,

pero también las comidas.

Compartimos los paseos

por una hermosa ciudad,

y hasta en mi casa durmió.

Nunca lo podré olvidar.

Mi querido amigo Juanjo,

has dejado aquí tu esencia,

y aunque te has marchado lejos,

donde los cuerpos no llegan,

vives en mi corazón,

y te llevo en mi cabeza.

Sólo has partido temprano,

hacia el cielo, en tu viaje.

Llevando como equipaje,

nuestro cariño de hermanos.

Algún día nos veremos

en ese bello lugar

en donde habitan los sueños,

para poderte abrazar.

* * * 

Fernando Cravioto

13/07/2017

A Juanjo, un compañero de vida.